El viernes, la moneda mexicana logró remontar fuertes pérdidas observadas en operaciones matutinas, provocadas por datos económicos débiles reportados en Estados Unidos.

CIUDAD DE MÉXICO.- Este viernes el tipo de cambio se presiona al alza por señales de debilidad en el mercado laboral norteamericano y la baja en los precios del petróleo. El dólar en operaciones al mayoreo rompe al alza la barrera de las 18 unidades, al operar en 18.05 de acuerdo con cifras de Bloomberg. En ventanilla bancaria el billete verde se vende en 18.35 pesos con base en cifras publicadas por Banamex. La moneda mexicana se perfila para acumular su cuarta jornada en terreno negativo. La aversión al riesgo se incrementó luego de que en los Estados Unidos se dieron a conocer sorpresivos datos con respecto al desempeño en el mercado laboral. La generación de empleo no agrícola bajó a 160 mil en el pasado abril desde una cifra revisada de 208 mil de marzo. El promedio del mercado esperaba un incremento de 200 mil nuevos puestos de trabajo. La tasa general de desempleo fue de 5.0 mayor al 4.9 por ciento estimado, durante el cuarto mes del año. Las señalas de debilidad en la principal economía del mundo, borraron las apuestas de que en el presente año se podría dar un nuevo incremento en la tasa de referencia de la Reserva Federal, actualmente en el rango de 0.25 a 0.50 por ciento. La menor actividad en los Estados Unidos es una pésima noticia para el sector exportador de México y, por lo tanto, para la generación de divisas. El comportamiento del mercado petrolero tampoco le es favorable al peso mexicano. El crudo West Texas Intermediate baja 1.26 por ciento a 43.76 dólares por barril, en tanto que el Brent cae 1.36 a 44.40 dólares. El tipo de cambio en operaciones al mayoreo está rompiendo al alza un nivel clave de las 18 unidades, que en caso de confirmarse al cierre podría significar una extensión de la debilidad del peso. A la caída del peso también contribuye el hecho de que ayer el Banco de México dejó sin cambio a su tasa de referencia. Con esto el tipo de cambio se mantiene como la variable de ajuste. En caso de que se extienda o acelera la caída de la moneda mexicana podría llevar a la autoridad cambiaria a tener que inyectar liquidez al mercado.
Esteban Rojas